2 Euros España 2014: Parque Güell

La moneda conmemorativa de 2 Euros de España de este año está dedicada al Parque Güell, continuando con la serie centrada en los lugares del país que son Patrimonio de la Humanidad.

En la denominación oficial se empleó la palabra inglesa Park
en lugar de la catalana Parc o la castellana Parque

Al Parque Güell llegan cada año millones de turistas por el patrimonio modernista que encierra y por las espectaculares vistas de la ciudad y su entorno. El conjunto fue inaugurado en 1914 y fue diseñado por el arquitecto Antoni Gaudí. Se crearon ocho millones de unidades que se pusieron en circulación el 18 de marzo de 2014.

Situación de España en Europa

Integrando varios de los elementos más característicos del parque es como la moneda trasmite la esencia del recinto: el dragón de la escalinata de la entrada, que se ha convertido en el símbolo más visible del parque, y una de las chimeneas de ventilación, con una forma tan original y llamativa que apenas nadie imagina su verdadera función. Es una pena que la moneda no pueda recoger el colorido de todo el conjunto, sin embargo se ha hecho un gran trabajo por captar la textura de los elementos. A la izquierda tenemos el nombre del país (ESPAÑA) y el año de emisión (2014); en la parte derecha tenemos el símbolo de la casa de la moneda (una M con corona) y la leyenda PARK GÜELL – GAUDÍ. Esta es la primera vez que se añade en una moneda de la serie Patrimonio de la Humanidad el nombre del elemento representado, lo cual aporta claridad; sin embargo no veo motivo para incluir el nombre de Gaudí, ya que la moneda pretende recoger únicamente el parque, no es un homenaje al genial arquitecto (algo así se podría hacer de dos manera: recogiendo el rostro del arquitecto (aburrida) o haciendo una composición con varias de sus obras (más original)).

Los elementos recogidos en la moneda: la chimenea y el dragón

Antoni Gaudí y el Conde Güell planificaron construir una urbanización de lujo apartada del centro de la ciudad, pero rodeada de un gran patrimonio natural y arquitectónico. En el diseño del parque influyeron notablemente las ideas que ambos compartían: catalanismo y cristianismo. Sin embargo, el proyecto fue un fracaso y sólo se vendieron dos de las casa proyectadas (una de ellas para el propio Gaudí); los motivos no están claros, pero se apunta a la lejanía de la urbanización del centro de Barcelona y la falta de apoyo de la burguesía a un proyecto tan pro-catalanista. Las obras comenzaron en 1900 y, aunque seis años más tarde ya se sabía que no tendría éxito, continuaron las obras de las zonas comunes hasta 1914.

Las dos únicas casas construidas,
en la de la izquierda habitó Gaudí y hoy es un museo

La entrada principal está flanqueada por dos pabellones completamente modernistas y que fueron diseñadas para que parecieran casitas de cuento de hadas. Uno de estos pabellones tiene una torre coronada por una cruz; la original fue destruida durante la Guerra Civil y la sustituta parece no ser muy fiel a la original.

Pabellones de entrada, a la derecha la cruz en detalle

Después encontramos la escalera principal, flanqueada por muros cóncavos y en la que destacan los conjuntos escultóricos situados en el centro. Una de ellas recoge el escudo de Cataluña bordeada por un hexágono rodeado de hojas de eucalipto; tiene la cabeza de un lagarto con múltiples posibles significados. Sin embargo la fuente más famosa es la del dragón, en homenaje a la ciudad de Nimes donde el Conde Güell vivió en su juventud.

Escalera principal del Parque Güell, con sus fuentes más representativas

Al terminar la escalera nos encontramos con un espacio techado plagado de columnas dóricas, la Sala Hipóstila, inicialmente diseñada como un mercado cubierto para la urbanización. El techo se encuentra recubierto con el habitual trencadís blanco salpicado con rosetas. Las columnas exteriores se encuentran coronadas por gárgolas de leones.

Sala Hipóstila, con detalles de las rosetas del techo (arriba)
y las gárgolas con forma de león (abajo)

Encima de esta sala se encuentra la Plaza Oval, desde la que se pueden observar toda la ciudad cómodamente sentado en los coloridos bancos ondulantes. En estas composiciones predominan los colores azul, verde y amarillo que simbolizan la fe, la esperanza y la caridad, respectivamente, aunque también se incluyeron el rosa en homenaje a la Virgen María y frases alegóricas en catalán y latín.

Vista aérea de la Plaza Oval y diferentes detalles de sus asientos curvados

Además Gaudí diseñó una serie de viaductos porticados para facilitar la comunicación por el parque y proyectó una capilla en la parte más alta que, debido al fracaso de la urbanización, fue sustituida por un promontorio conocido como el Calvario.

El Calvario (arriba a la derecha) y diferentes viaductos repartidos por el parque

Tras la muerte de Güell y Gaudí, sus herederos vendieron el parque al Ayuntamiento de Barcelona y desde entonces fue abierto al público, aunque actualmente hay que pagar una entrada para acceder.

Hoy en día se ha convertido en uno de los símbolos más conocidos de Barcelona y es un lugar precioso para caminar y disfrutar de la naturaleza que encierra.

 © Copyright del texto y de las fotografías de monedas propiedad de Daniel Grimoir